Los jardines verticales no deben de ser solamente un ecosistema vertical, una mejora visual o un filtro de aire, además de todo esto, un jardín vertical puede ser una huerta vertical, es decir un jardín en el que cultivar plantas comestibles.
Un jardín vertical se puede usar como soporte para crear una huerta vertical en cualquier rincón de nuestra vivienda, tanto a pleno sol (lo más recomendable) como a media sombra (usando las verduras de sombra que ya comentamos en este artículo)
El cultivo de hortalizas en forma de jardines verticales es probablemente uno de los usos más prácticos de un jardín vertical, ya que añade multitud de beneficios al hecho de tener una huerta: no hay que agacharse para cuidar del jardín; es una huerta en la que se trabaja erguido en la mayoría de los casos.
Además tiene el beneficio obvio de que lo que cultivamos lo podemos comer. En un jardín vertical usado como huerta vertical podemos cultivar una gran variedad de plantas comestibles, como lechugas, tomates, salvia, romero, lavanda, apio y muchas verduras y aromáticas más. También podemos cultivar plantas de flores comestibles, como claveles, pensamientos, primaveras…
Es importante organizar las plantas en función de sus demandas de riego, ya que si no es así el fracaso del jardín vertical será seguro. Si la idea es tener una huerta de aromáticas no podremos plantar vegetales de mayor demanda de agua, como lechugas. Lo recomendable es separar las huertas verticales en base a la producción deseada.
Unos cuantos consejos a la hora de cultivar en nuestros jardines verticales de huerta:
Elije una pared soleada. Lo mejor para un huerto vertical (u horizontal) es tener el máximo de horas de luz posibles, como mínimo 6 horas, para menos horas de luz hay opciones también, pero estaremos limitados.
Define el tipo de vegetación que quieres. Como hemos visto antes, no es recomendable mezclar plantas con diferentes requerimientos de riego.
Elije las plantas en función de tus gustos. Esto puede parecer obvio, pero no siempre vamos a poder cultivar lo que nos gusta; no obstante, si te apetece, prueba, experimenta con diferentes plantas, verduras, frutas y aprende de ello.
No olvides planificar el riego. Las plantas de huerta suelen tener una demanda de riego alta, por lo que hay que tenerlo en cuenta a la hora de elegirlas. Si no vamos a poder atender el riego de ellas es posible que mueran.
Si estás interesado en crear una huerta vertical, un jardín en el que aprovechar el espacio y obtener además algo de producción aprovechable, puedes ponerte en contacto con nosotros, somos especialistas en jardines verticales y te asesoraremos de forma óptima para conseguirlo. Como muestra de ello, podéis ver el jardín vertical de interior que colocamos en una cocina en Barcelona en este artículo.
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